Por David er Benaca
Os
cuento lo que fue la carrera en sí, porque el fin de semana que he pasado es
bastante largo y con tantos detalles que no seria capaz de plasmarlos en esta
página y además, para mí se queda, jejeje.
Ha
sido una experiencia imposible de olvidar porque, seguramente, no viviré jamás
un ambiente de running como éste. Hablando con un madrileño que corre la san
silvestre, dice que no tiene ni punto de comparación con esta. La organización
cuidada hasta el útimo detalle, el corredor mimado hasta no poder mas, y
posiblemente las carreras mas importantes del mundo no sean tan perfectas como
esta: enhorabuena al club FORTUNA, organizador de este macroevento. Que
aprendan los de la nocturna del guadalquivir.
Me
presento en el restaurante del hotel a las 7:30 de la mañana para pegarme un
buen desayuno y primer subidón: todo el salon lleno de corredores pegandose
unos desayunos bestiales y una mesa con un monton de “negritos”, entre los que
se encontraba ¡¡¡el futuro ganador de la prueba!!!. Me senté en una mesa con
tres corredores del club de atletismo de Rentería, otros tres del club de
atletismo de Olot, y cuatro de la Rioja (no me acuerdo del nombre del Club). El
único que se estrenaba en esta prueba era yo, el resto llevaban, el que menos
cinco ediciones y todos cincidieron en lo mismo: repetirás, seguro. Empezaron
a darme pequeños consejos: hidrátate
constantemente, pues es muy alta la humedad y va a hacer mucha calor y mantén
la cabeza fría, pues el gentio te anima tanto y te dá tal subidón que es muy
probable que corras por encima de tus posibilidades y lo acabes pagando.
Después
de un desayuno que no olvidaré nos fuimos al Hall del hotel donde a las 8:30
nos recogía un autobus que nos llevaria al pueblo de Behobia (Irún) que lo
divide de Francia el Puente Internacional que se encuentra sobre el rio
Bidasoa. A las 9:30 llegamos a Behobia, donde al bajarnos del autobus empieza
un cosquilleo que no desapareció hasta que no entre en meta. Había dorsales de
varios colores: Los primeros rojos, verdes, azules, naranjas y finalizando en
blancos. Yo estaba en los de color azul. La salida de los primeros fue a las
once y los de color azul, que estabamos divividos en tres grupos salimos a las
11:18, 11:24 (en ese grupo salí yo) y 11:30. A las 10:30 de la mañana no cabía
un alfiler en aquella avenida impresionante. Antes a las 10:15 salieron los
discapacitados y a las 10:45 los rollers (patinadores). A las 11:20 nos
plantamos en la linea de salida el grupo donde estaba yo (corredores desde el
dorsal 12.301 al 15.000, el mio era el 13.641).
Pistoletazo
de salida y a correr. Enfilamos la Avda. de Navarra, junto al Río Bidasoa en
Irun, donde no se puede ni correr por la cantidad de público que hay. Antes de
llegar al km. 2 empieza la primera subida de unos 300 metros al 8% que nos
lleva hasta Ventas de Irun. Toboganes constantemente hasta el km. 4 donde hay
una pequeña bajada para dejar ya atrás Irún. Llaneamos, e incluso bajamos hasta
el km. 6 donde empieza el infierno, el Puerto de GAINTXURIZKETA Los primeros
5kms. lo hago a 5 minutos clavados. Una subida de dos kilómetros (hasta el km.
8) donde se empiezan a ver los primeros síntomas de que la carrera iba a ser
tremendamente dura: vómitos, pajaras tremendas e incluso tropezones por
levantar poco los pies, que parecen que se pegaban al asfalto. Me recordaba
este puerto a los del tour de francia donde la cantidad de gente que había
estrechando la carretera, hasta tal punto que a los corredores nos obligaban a
ponernos en fila india. Me lleve todo el puerto con unas ganas de llorar por la
emoción que hasta se me escaparon unas lágrimas. Creo que las piernas iban
solas.
Al
coronar empieza para mi la peor parte de la carrera. Desde el km. 8 hasta el
kilometro 12 constantes toboganes donde empiezo a tener los primeros calambres,
aunque logro mantener el ritmo a 4:50 el km. En estos 4kms. Pasamos por la
localidad de Lezo, en dirección al Puerto de Pasajes. Desde el kilómetro 12 al
15 la carrera discurre por el Puerto pesquero de Pasajes y, es despues del
esfuerzo del puerto de GAINTXURIZKETA y
los 3 kms. de constantes toboganes cuando empiezan a verse los primeros dramas
que ponen la piel de gallina: corredores tirados en la carretera vomitando, uno
convulsionando, y ambulancias sin parar de recoger a gente (hay 3 personas en
la UVI y mas de 200 atenciones médicas durante la carrera, todo ello debido a
lo exigente del recorrido, a la alta temperatura y a la humedad reinante ese
día (mas del 80%). A partir del km. 16 empieza otra parte inolvidable de la
carrera.
Dejando
atrás mis calambres y fisicamente crecido por la cantidad tan impresionante de
gente que ya no nos dejaria hasta meta, empezamos a subir el puerto de MIRACRUZ
en el barrio de Trintxerpe. Le llaman la pared de San Sebastián. Un puerto de
1km. Corto pero muy, muy exigente, donde se me llega a pasar por la cabeza
incluso parar, pero no podía, pues las piernas se me iban solas con los ánimos
de los aficionados. Al coronar el puerto, justo enfrente del restaurante de
Arzak, empezamos una bajada hacia el barrio de GROS donde la gente parecia
estar poseída, fuera de sí, animando de una forma como seguramente no veré
jamas.
Enfilamos
los 2 últimos kilómetros a la altura de la playa de la Zurriola. El kilómetro
19 y 20 transcurre por avda. de la Zurriola, Palacio de Congreso del Kursaal,
Puente del Kursaal y Alameda del Boulevard, lugar de la meta a la altura del
ayuntamiento y de la Playa de la Concha. Me hago los 2 últimos kms. A ¡¡¡4:03 y
4:02!!! y clavo el tiempo en 1h38m10s. ¡¡¡Ostias que de gente!!!. los
avituallamientos de la carrera, todos, me costaban trabajo de digerir por la
emoción constante. Toda la carrera con un nudo en la garganta. Fijarse como de
bien cuidada esta la organización y el trato al corredor que al llegar hay una
fila de voluntarios en horizontal sentados en unos bancos con una especie de
poyete donde tu apoyabas el pie y te quitaban el chip para que no te tuvieres
ni que agachar. Una medalla, cantidad y variedad de fruta (platanos, peras,
manzanas, naranjas en cantidades para hartar a cada corredor), igualmente con
los líquidos (agua, coca-cola, gatorade, zumos), barritas energéticas....
Sufrimiento para reventar, pero de verdad, creo que hubiera sido capaz de
correr otros 10kms más, solamente para no dejar de ver tal espectaculo.
Ricardo,
Luis, Fran, dicen los corredores que han corrido medias por toda europa (hable
con uno de Madrid y otro de Palencia que han corrido una docenas de medias y
maratones por toda europa, entre ellas las de Berlin, Praga, Viena y Estocolmo
entre otras) que no hay nada que se asemeje a la Behobia, pero yo os digo que
si la maratón cuenta con público igual de entusiasta y entregado que el de esta
carrera, seguro que se os escapa mas de una lágrima y por supuesto vais a dar
un poco mas de lo máximo, ese poco más que no sabemos que tenemos y que yo he
sacado en esta ocasión. No os puedo dar mas detalles porqué esta experiencia ha
sido inenarrable. Os invito a realizar alguna vez esta prueba porque no creo
que experimenteis unas sensaciones como las que yo he experimentado. Yo si no
hay causa de fuerza mayor, no me la pienso perder mientras mi cuerpo siga
corriendo. Seguro que se me quedan montones de detalles en el tintero pero todavia
no logro asimilar dicha experiencia para plasmarlos todos en el papel:
INOLVIDABLE
QUE HUEVOS TIENES, BENACA.
ResponderEliminarDESDE YA DIGO QUE EL AÑO QUE VIENE VOY.
Ole, ole, ole....
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