viernes, 31 de diciembre de 2010

lunes, 20 de diciembre de 2010

XXXII Media Maratón Sevilla - Los Palacios

Como no podía ser de otra manera, una media maratón para terminar el año. Teniendo en cuenta que desde septiembre hemos corrido más veces los 21km que cualquier otro tipo de carrera, parece lógico que hayamos escogido Los Palacios para cerrar este año inaugural del club que, por lo menos a mí, me parece que ha sido redondo.

Al final ha salido bien y los tres mosqueteros del Aljarafe (Jose volvió a descolgarse por falta de entrenamiento) estábamos en la línea de salida de Bellavista a las 11 en punto. Pero solo unas horas antes el que escribe, (Luis) pensaba que iba a correr solo, hubiera sido la primera vez que nos ocurre. Problemas familiares del Richar y problemas de ¿..? Fran el Coria, hacía presagiar que los Últimos solo iban a llevar un corredor a la mejor carrera de la provincia de Sevilla. Pero no, al final las ganas de correr y el veneno de este deporte pudo con las demás cosas y allí que estuvimos los tres para desafiar al atleta de bronce que nos esperaba en territorio palaciego.

Después de una caótica llegada a la línea de salida en Bellavista a eso de las 10:40 (tiempo de sobra, teniendo en cuenta nuestro calentamiento...) por fin nos reunimos los tres con tiempo apenas de desvetirnos, ponernos los dorsales, vaselina, entregar mochilas y poco más... No quiero olvidarme de la llamada del speaker desde la megafonía "Útimos del Aljarafe, diríjanse a megafonía". El Richar y yo lo flipamos, porque faltaban diez minutos para empezar y allí había 3000 personas, ¿quién nos estaba llamando? Pues el coriano, que acababa de llegar, claro.

Con la compañía de Mariló hasta el mismo barullo de la salida, (gracias guapísima) apenas tuvimos tiempo de enfriarnos porque cinco minutos después de situarnos sonó el disparo y allí que nos pusimos a la tarea a la que veníamos. El KM1 fue el normal de una carrera masificada como ésta. Gracias a que no había curvas cerca de la salida y a que la calzada era muy ancha pudimos poner cierta velocidad desde el primer momento. Y fuimos los tres juntos, por supuesto. Lo hicimos en 05:03. No es mal ritmo para un primer 1000.
En el KM2 enfilamos ya el polígono La Isla. Hace sol y no tanto frío como creíamos. Van volando los primeros guantes, camisetas y sudaderas viejas que se ha puesto la gente para no enfriarse en la salida y hay miles de comentarios y risas entre los corredores. Parece un momento relajado pero a mí siempre me ponen nervioso estos primeros kms. Los tres vamos bien, un poco silenciosos. Subimos un poco a 05:00.
KM3 desde hace unos minutos empieza a vislumbrase el SORPRESÓN del día: el Richar se va quedado poco a poco. Primero son unos metros de nada. Miro hacia atrás y lo veo ahí, es normal, pienso, "es su extraña forma de correr". Pero poco a poco la distancia se agranda. Le digo una vez a Fran que aminore un minuto para que se enganche, pero Ricardo parece que no tiene planes ni ganas de enganchar. Vamos cogiendo nuestra velocidad media y el ritmo marca ya 04:57.
En el KM4 seguimos Fran y yo delante y Ricardo unos metros por detrás, pero como hay tantos corredores, porque vamos en la parte gorda del pelotón, cada vez es más difícil verlo. Cerca del avituallamiento del 5 Fran y yo decidimos dejarlo estar, al mákina le gusta ir por sensaciones y luego, si puede, nos pasará sin pararse a mirar. Pues vale. Aumentamos a 04:53.
KM5 y primer avituallamiento. Los avituallamientos, por su gran número, han sido una realidad muy presente en esta carrera. Bien organizados por lo general, con mesas a ambos lados, pero como hay tanto corredor junto, hay que estar muy pendiente para que nadie te empuje, ni empujar a nadie, ni resbalarse con tanta botella, esponja o cáscara de naranja. Por cierto, qué ricas las naranjas... Aunque no tenía planes de beber tan pronto, cojo una botella y me despego un poco de Fran. El ritmo en este km es de 04:57.
KM6 acabamos de entrar en la carretera de la Corchuela, donde se desarrollan dos tercios de la carrera y de fondo ya se ve la famosa cuesta del km7. Voy siempre rodeado de corredores pero, otra sorpresa, Fran se me ha escapado por delante. Él dice que no aumentó el ritmo en ningún momento, pero los tiempos que estoy escribiendo aquí son los que me marca el garmin, y ése no miente. De hecho en este km incluso aumento el rimo hasta 04:54.

Aquí tengo que hacer un inciso para putear al Fran, porque se lo merece. Por si alguien no lo sabe: estuvo toda la semana previa a la Media diciendo que igual se descolgaba por falta de entreno, que luego en las carreras lo pasa muy mal si se queda solo y que sufre lo más grande y no se cuántas mamonadas más... y mirad por donde el coriano éste se nos escapa por delante en el km5 y ya no le volvemos a ver hasta la entrega de los regalos en meta. ¡¿Se puede ser más perro?! Desde aquí Fran, te repito lo que te dije el domingo 200 veces: guárdate para siempre todo tu catálogo de excusas previas porque no te va a creer nadie más en la vida. (Te lo digo de buen rollo... ok?)

Ya llevo un km rodando solo. Los últimos 400m del 6 y el arranque del KM7 se desarrollan en la famosa cuesta. Oigo la estrategia de los corredores que hablan a mi alrededor y decido seguirla: voy a conservar subiendo y luego aprieto arriba, que el km7 es demasiado pronto para ir desfondándose. Tiene huevos la cuesta, pero tampoco es ningún infierno y la subo bien. Tras la bajadita viene otro falso llano que pica hacia arriba. Continuas subidas y bajadas en la carrera, nada de "carrera casi llana" con la que la publicitan. El tema de las cuestas me hace bajar hasta un 05:07.
En el KM8 marco 04:59 y no sé por qué, el terreno es casi todo descendente. Sin embargo en el KM9 meto ya una velocidad más y marco un ritmo de 04:42.
En el KM10 llevo ya un rato corriendo sin mis compis, pero siempre rodeado de otros corredores. En esta carrera que me he encontrado tan bien y no he sufrido mucho, he estado estudiando bastante el terreno y sobre todo los corredores que tenían mi ritmo. He retenido visualmente a un grupo de 5-10 y siempre he ido buscándolos, hasta la meta. A veces me adelantaban pero poco después llegaba de nuevo a su altura y viceversa. No he mantenido mucho contacto verbal con ellos, pero me ha gustado esta experiencia. Apoya y te motiva para apretar en ciertos momentos. Pienso repetirla. Vuelvo al ritmo medio de 04:55.
KM11 me voy comiendo la naraja que cogí en el avituallamiento anterior. Pasamos por una zona donde el viento molesta mucho más. Voy estudiando cómo resguardarme tras otros corredores. Ritmo de 04:58.
En el KM12 ocurre lo que estaba esperando de un momento a otro. El Richar llega hasta mi altura y me dice "vamos Luis". Eso es señal de que quiere que tiremos más fuerte los dos juntos un rato, pienso yo. Ok, pero no quiero comprometer mi ritmo medio bastante alegre con el que me estoy sintiendo muy cómodo desde el principio. Me apetece tirar los dos juntos unos kms, pero de pronto, 500m después de llegar a mi altura, veo que el Richar se va quedado otra vez. Lo miro y le digo que enganche, pero me dice que vaya a mi ritmo y que adiós muy buenas. Pues nada, otra vez solo.
El KM13 es casi todo de suave bajada, ya digo que la carretera está llena de repechos. Vienen muy bien a estas alturas. Aún así no me cebo y sigo en mi 04:58.
En el KM14 la carretera vira hacia el suroeste metiéndose el viento de cara. Me pongo a hacer un eslalon la mar de entrenido, adelantando corredores y recuperándome medio metro detrás de ellos para resguardarme del viento. Seguro que alguno se da cuenta, pero me da igual, tácticas de carrera, jeje. Por todas estas pequeñas cosas me ha gustado estar tan despierto y tan fresco en esta media. Si vas reventado no te enteras de nada, te confortmas con seguir corriendo. Con tanta carrrerita he subido un poco el ritmo a 04:50.
KM15 y 16 ya se ve el pueblo de fondo, las piernas están cansadas pero el alma se empieza a poner contenta. Aún así no hay que cebarse, medias de 04:54 y 04:51.
KM17 aquí anunciaban "la otra cuesta" de la carrera... No es más que la subida y bajada del puente que sobrepasa la N-IV. Detrás de la carretera, el fantástico ambiente en las calles de Los Palacios y Villafranca nos espera. La subidita no me hace mella ninguna, pero me aumenta el ritmo medio hasta 05:01.
KM18 ¡subidón! vaya ambiente en las calles. La gente de Los Palacios se merece una carrera cómo ésta solo por la entrega con la que te reciben. La gente se agolpa en las puertas de las casas, fuera de los bares, en las esquinas... algunos hasta han sacado sillas a la calle... En medio de este ambientazo me llega por detrás Ricardo. Llega y se va, sin decir nada. Iba lanzado ya en sus últimos tres kms y su único plan era exprimir lo que le quedara en las piernas. Lo hace muchas veces. Me anima tenerlo delante durante un rato y bajo la media en este km hasta 04:49. Pienso "venga, vamos a darlo todo, como si fuera un entrenamiento de ritmos de 3000m". Pero cuando llego al cartel del km19 decido conservar un poco de lo que me queda para llegar a meta esprintando fuerte, como se merece esta carrera.
KM19 conservo más de la cuenta, no pensaba volver al 5, pero hago 05:03 en este penúltimo 1000. No es que me arrepienta, pero sí que peco de demasiado conservador, (05:03 a estas alturas???? que rácano!) Las calles siguen llenas y la mitad del esfuerzo lo hacen los vecinos de Los Palacios, no me canso de comentarlo.
KM20 ya está todo hecho, ahora sí que hay que meter caña. En este momento ya no veo manos de los niños para chocar, ni bordillos de acera, ni corredores que han hecho conmigo toda la carrera. Ahora solo hay que sufrir y meterle velocidad. Dos paréntesis en los que me fijo: adelanto en recta de meta a un corredor que ha hecho conmigo toda la carrera y le hago un gesto. Y mi compi de trabajo, Celia, me saluda desde las vallas con todo el arte que ella tiene. El resto de las imágenes de ese km las veo como en un túnel acelerado... Aún así tampoco es para tirar cohetes, he subido solo a 04:55

RECTA DE META: 150 m con gradas a cada lado (que yo no veo) y que hago a 03:15. Bonito sprint para terminar.

Seguramente me habrá quedado larguísima la crónica, como siempre, pero esta vez con más razón porque estuve muy despierto y muy atento a todos los detalles en esta carrera tan bonita. Eso y mi recuperación perfecta, es señal de que cumplo con el plan de entrenamiento y de que sigo sin cebarme en la competición. Quizás sigo pecando de conservador en muchos momentos. Tengo que mirarme eso.
Fran llegó un minuto antes que Ricardo, que también me sacó un minuto a mí. Así que seguimos los tres en esos dos minutos de horquilla.

Con esta carrera cerramos este año glorioso donde empezó todo. Ojalá dentro de mucho tiempo hablemos del 2010 como el año en el que comenzamos a correr a carreras y en el que nuestro C.D. Últimos del Aljarafe, empezaba a dar los primeros pasos. Y que para entonces, el club tenga un montón de corredores en sus filas y trofeos (por qué no?) en sus vitrinas. Y también que nosotros vayamos mejorando año a año nuestros tiempos, aunque seamos más viejos y más gordos... porque en este fascinante deporte no importa tanto la talla de pantalones, ni la edad, para ser cada vez mejor. Lo que importa es la constancia, el trabajo diario, la dedicación y las ganas.

Eso siempre, muchas ganas. Ojalá no se nos acaben nunca.